La iluminación perfecta de las obras expuestas en galerías y museos

Para celebrar el Día Internacional de los museos del Mundo entero. Publicación realizada el 24/10/2013.

Para Grupo Lledó crear una escenografía perfecta no solo requiere cumplir totalmente las aspiraciones arquitecturales y artísticas; Los requerimientos de conservación deben tenerse muy en cuenta. Ya que la luz usada de manera inapropiada podría dañar los objetos expuestos. Por tanto es importante conseguir una solución de iluminación que proporcione la iluminación adecuada y ponga los objetos en valor de una manera delicada pero altamente efectiva.

Con el desarrollo del LED este pasa a ser una alternativa para la iluminación de museos hasta ahora resuelta fundamentalmente con halógenos, caracterizados por una excelente reproducción cromática y bajo potencial de daño a los objetos.

Dentro de los estudios que pretenden determinar la validez del LED como alternativa a los halógenos, Lledó realizó la experiencia que se indica a continuación, con el fin de demostrar que pueden aportar ventajas en cuanto a la calidad de la luz y a la eficiencia energética. El test consistió en realizar mediciones sobre una pintura expuesta iluminada mediante un proyector convencional con fuente de luz halógena y compararlo con los resultados obtenidos al iluminarlo con proyector con tecnología LED.

Las mediciones se realizaron sobre un Arlequín de Picasso, una pintura de 1916 perteneciente a una colección privada.

Se definieron como importantes a la hora de iluminar objetos artísticos una serie de parámetros, tanto eléctricos como fotométricos:

– Temperatura de Color
– Espectro Emisión
– Reproducción Cromática
– Iluminancia
– Homogeneidad
– Potencial de Daño
– Carga instalada

La medición de los valores se hace a través de una matriz de 16 puntos de control que sobre el objeto expuesto. Este patrón es suficientemente denso para cubrir de manera representativa la superficie.

El material de la pintura es papel muy fino sobre una base de papel más resistente, para los cálculos se tomará la base de material con las mismas propiedades que el papel estraza.

Las mediciones se realizan directamente sobre la obra o bien sobre una placa protectora de cristal a pocos centímetros de la superficie de la pintura.